La profesión de arquitecto le enseña a uno a pensar en necesidades y materializarlas en espacios. Diseñar implica trabajar con conceptos y principios del acto creativo que ponen al rol del arquitecto en un plano similar al del “Director de orquesta”.
La Bauhaus , Escuela de diseño integral (1919-1933), vinculó la industria con el diseño de vanguardia, que se venia gestando desde el cubismo (1907) e implicó una ruptura con el espacio académico,
a saber, pérdida del sistema de composición clásico e introducción de la cuarta dimensión espacio-tiempo; “HAY QUE RECORRER LAS OBRAS PARA ENTENDERLAS”.
La abstracción envolvió al siglo veinte. El Futurismo italiano, el Constructivismo y el Suprematismo rusos, el Neoplasticismo holandés, el Expresionismo abstracto y el Surrealismo, enfocan puntos de vista a partir de “ LO QUE UNO ENTIENDE, NO LO QUE VE”.
Los espacios fluyen, la flexibilidad del diseño se apoya en los nuevos materiales (hormigón armado y acero), plantean nuevas formas de habitar, por extensión, de sentir una nueva realidad. El hombre del siglo veinte tiene necesidades diferentes al de otras épocas. El espacio arquitectónico y el habitar tienen importancia en la concepción del diseño. Uno es adicto al otro.
No obstante esto generó y genera grandes controversias. La arquitectura es o no es un arte? De ser así... ¿como se habita “una obra artística”?
Con la Escuela de Chicago (1871-1893), comenzó a circular el slogan.. ”LA FORMA SIGUE A LA FUNCION”. Esto dió inicio al funcionalismo tecnológico. Los espacios se diseñaban para expresar su función, pero la “psicología del habitar” entró en conflicto entre los grandes maestros de la arquitectura , Frank Lloyd Wright , Le Corbusier, Mies van der Rohe... inclusive nuestro Amancio Williams. Célebres sus roces con Alberto Williams, padre del arquitecto y comitente de la legendaria CASA DEL PUENTE (mar del plata 1943).
Hacia la década del cuarenta con el arquitecto finlandés Alvar Aalto, se alcanzaron en los espacios arquitectónicos la “humanización del funcionalismo”... olores, texturas, colores, madera laminada, ladrillo, poca superficie cromada ... se alcanzó un equilibrio entre el organicismo y el racionalismo .
Hoy, hay tendencias en la cultura posmoderna como ser el REGIONALISMO CRITICO (Luis Barragan, Ricardo Legorreta ,Alvaro Siza), o la obra del japonés Tadao Ando, en donde los espacios estan trabajados con una poética muy especial. La luz ocupa un rol “inspirador”, existe un marcado MINIMALISMO en la síntesis de su arquitectura... LO MENOS ES MAS o como decía Adolf Loos ...
”El ornamento es un crimen”.
Habitar,Pensar, Diseñar.....tres elementos que son más que variables creativas. Estan en la esencia del hombre como ser cultural. Su racionalidad dispara la materialización del habitar. Siendo el acto creativo un catalizador de ideas...”UNA IDEA ES UNA FUERZA” (Van de Velde), ser arquitecto implica la responsabilidad de dar soluciones para una sociedad cada vez mas compleja .
La casa de la Cascada, Link: http://www.hogardesign.com.ar/grandes-casas/20/index.html
Versalles, Link: http://www.hogardesign.com.ar/grandes-casas/index.html
Panteon, Link: http://www.hogardesign.com.ar/grandes-casas/index.html
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